Tantos años de investigación médica y estudios para alargar la vida y mejorar la condición humana para que ahora la avaricia y el egoísmo quieran hacernos desaparecer lo antes posible y así no interferir en sus planes.
Y me incluyo entre éstos a los que quieren hacer desaparecer, porque quieren acabar con todos los que no seguimos el orden que ellos quieren: ancianos (porque supuestamente no producen y suponen un gasto…hay que tener valor para pensar así), los autónomos (según ellos, ganamos demasiado, sin olvidar que no es así y que cada euro es producto de una lágrima y esfuerzo ilimitado y con un horario que también lo es) ,pensadores libres (especialmente algunos jóvenes por el gran peligro que eso implica) y muchos más.
Pero son astutos y no lo van a hacer de manera directa, no, eso sería descabellado incluso para los actuales personajes de la silla presidencial y sus anexos, porque lo están haciendo mediante otras vías para algun@s menos evidentes.
Lo están intentando a través de:
-la Salud general , con las “vacunas” (más bien inoculaciones) que ya se han realizado a millones de personas en este mundo y que ya ha quedado demostrado que perjudican más que benefician (por decir suavemente que está acabando con la vida de muchísimas personas, supongo que basándose en el «sólo los más fuertes sobrevivirán» ..lo cual chirría un poco teniendo en cuenta lo sucedido con algun@s deportistas de élite).
-La salud mental, pues nos están volviendo locos con todos los miedos que nos meten en la cabeza y que está provocando un aumento desproporcionado en los índices de suicidios en el mundo entero y por diferentes motivos (no les importa, solo quieren reducir la población de la manera menos descarada posible ya que, cuantos menos haya para repartir el pastel, más parte les toca).
-A través del enfrentamiento entre nosotros, “guerras” en lo militar (Ukrania-Rusia) y en lo social-político (l@s ciudadan@s de derecha e izquierda se tiran los trastos a la cabeza, pero no así l@s polític@s); y de manera más directa, se vive en las calles cada día y noche con atracos, violaciones e incluso asesinatos como prueba de lo lejos que ha quedado la inviolabilidad del ser humano y el respeto por la vida de éste.
Triste, pero a ésto hemos llegado con el permiso y, en algunos casos, incluso la colaboración de tod@s. Y te lo explico de manera más suave pero igual de significativa, mira:
¿Cuál crees que es el objetivo de bajar el nivel intelectual? Se ve en colegios, institutos y universidades. No solo quitan asignaturas (filosofía, por citar un ejemplo), sino también el contenido de algunas de ellas (la regla de tres en matemáticas, la cual considero básica y una de las cosas que utilizo a diario).
Se atreven, incluso, a pasar de curso sin aprobar (creo que no hace falta que te diga lo que va a pasar con el esfuerzo, la motivación y la actitud necesaria para conseguir los objetivos que te propongas). La meritocracia por los aires, dicho más claramente.
Todo esto está pasando y no estamos haciendo nada para pararlo. Y con esta aceptación, no están acabando con nosotros como ciudadanos, sino también como individuos con inquietudes, superación y motivados por alcanzar objetivos que nos hagan felices; no vamos a querer llegar a nuestra plenitud como seres vivos. Ya no importa nada de eso, ahora reina la pasividad, la desidia, la desgana y la comodidad. Preferimos que nos mantengan, que nos lo den todo hecho; a mí me cuesta entenderlo.
Pensándolo bien, no les culpo en su totalidad, porque más que acabar con nosotros, creo que nos estamos dejando eliminar. Les estamos permitiendo que nos hagan desaparecer como personas. Veo que el concepto de persona como lo conocíamos hasta ahora parece que se desvanece para convertirnos en peones colaboradores de cualquiera que sea la meta que conste en la agenda propuesta.
¿Ya piensas que soy un conspiranoico? Probablemente lo hagas, no pasa nada, eres libre de opinar, pero sigue leyendo..
Y mientras lees, piensa si el mundo en que vives es como lo imaginabas.
Lo dudo.
Le damos más importancia a un partido de fútbol que a la debacle de un país. Conocemos más nombres de futbolistas y sus trayectorias que a los políticos que tienen nuestras vidas en sus manos. ¿No te parece más propio de ciencia ficción que de la realidad?
En este mundo lleno de redes sociales, hay muchas imágenes y videos felices que sólo son la portada de personas tristes, vacías, que emplean el tiempo en colgar que son felices en lugar de serlo sin tener que darlo a conocer.
Hoy en día suena más fuerte y más veces un teléfono móvil que el corazón de una persona, con todo lo que eso significa y lo mucho que debería doler; pero preferimos pensar que ese dispositivo nos hace felices y «nos acerca» a las personas que están lejos. Nos auto-engañamos; son excusas que necesitamos creernos para no reconocer la verdad: que nos falta corazón, pero no queremos que nos falte cobertura o batería.
Yo cuando quedo con una persona, intento que sólo suenen los huesos del abrazo que le doy. Ése es un sonido del amor, como tantos otros: la risa, una mirada, dar la mano, un silbido, las palabras… ¡¡¡Más de ésto y menos soniditos y microvideos!!!
¿Cómo vamos a echarle la culpa al mundo, a la sociedad, si nos importa más cómo viste una persona que su forma de pensar? No lo niegues, es así.
En la sociedad aborregada de hoy, seguimos a personas y apoyamos todo lo que digan, hagan o lleven puesto. Somos ídolos de los demás, nunca de nosotros mismos.
Nos centramos en cumplir los sueños de otros, en llevar su legado hasta donde ell@s quieren dejando a un lado nuestra propia vida, nuestros propios sueños e incluso nuestras propias metas. No somos nosotros mismos, intentamos ser otras personas a las que incomprensiblemente admiramos por lo que creemos ver detrás de una pantalla. Copiamos falsedad y en eso nos convertimos.
Los televisores son cada vez más inteligentes, al tiempo que nos cinverte a las personas más tontas. Los móviles más potentes y finos mientras que nosotros cada vez más débiles y gordos.
Piénsalo bien: llega antes la comida rápida que has pedido que la policía para atender al ciudadano o incluso que una ambulancia para salvar una vida. Y le he llamado comida porque la ingieres y entra por tu boca, pero la realidad es que tiene más químicos y conservantes de los que imaginas mientras que, para tu sorpresa, el jabón con el que te lavas las manos está lleno de nutrientes, miel, cereales y vitaminas. ¡Venga ya! Creo que estamos en un mundo sin sentido, con los valores cambiados.
Lo dicho en el título de este texto: El mundo al revés.
¡Pero si es que un futbolista cobra más que un médico, un bombero, un policia o un juez!!!! ¿Qué puedes esperar de este mundo? Los valores y las necesidades están totalmente tergiversados. No puede ser, joer, no puede seeeeeer.
Otro ejemplo ridículo del que yo mismo he sido partícipe. ¿Cuántas veces he oído que los animales son mejores que las personas? Yo mismo lo he dicho en sentido figurado alguna vez porque amo los animales, y son muy importantes en nuestras vidas, pero nunca más que las personas (o casi nunca, a tenor de los individuos que tenemos hoy en día).
Los animales son muy importantes, sobretodo si alejas a las personas, pero se puede tener todo y así ha de ser.
L@s animalistas pueden estar en desacuerdo con ésto, pero se equivocan en la dirección de sus quejas. Yo no creo que matar a un toro sea arte, lo digo alto y claro, pero tampoco creo que la función de alimentarnos sea algo de lo que avergonzarse y por ello nos merezcamos calificativos despectivos de todo tipo. Pero cuidado, no mates a un animal como «deporte» ni para alimentarte pero sí a un ser vivo que se está formando en el vientre materno. Lógica cero.
Y con ésto vivimos, de manera natural, como si fueran las perfectas piezas de una sociedad imperfecta que, cada vez más, se adecúa a nosotr@s.
¡Me niego! No es así, y tú también lo sabes, pero te han hecho creer que es lo que hay y que no puedes hacer nada. Nos han metido en la cabeza que sólo podemos dejarnos llevar por la corriente y que los que nos manejan saben lo que es mejor para nosotr@s. Y el más repetido mantra: «es asi y no hay nada que puedas hacer».
Y yo grito una vez más: ¡Me niego! ¡No es así! Tú decides la vida que quieres llevar; puedes cambiar tu pequeño mundo y, con ello, más gente despertará y esta reacción será cada vez más grande. ¡No estás sólo! No te escondas, tratan de avergonzarte por pensar diferente, pero hay mucho más ahí fuera y debes buscarlo; porque hay más como tú, como yo. Somos much@s y sólo debemos encontrarnos.
¿Quieres un mundo en el que has de esconderte por amar a los tuyos? ¿por proteger tu historia,tu tradición y tu forma de vida?Luchas cada día por intentar dejar un legado y…¿ellos están matando a plena luz del día? Sí, lo estàn haciendo llevando a asesinos a la calle, también a través de sus decretos injustificados, metiendo veneno en tu sangre a través de sus inoculaciones o diciéndote que has de comer carne prefabricada.
Y si no aceptas, te ponen un «pase» para que no pases y así te sientas marginado. No hay protección personal ni de la propiedad, ya que te dejan sin casa y protegen a lquienes delinquen. O, más directamente, te multan por decir cosas que van en contra de lo que ellos dicen, te suben los impuestos por trabajar y producir, e incluso se ponen a subir precios para que no puedas vivir como quieres ni disfrutar de lo que has conseguido a través de tu esfuerzo. Lo quieren para ellos.
Pero vamos a ver: ¿No quieres ser libre? Si lo ves demasiado o muy idílico (pobre de tí si es así), voy a irme a lo simple: ¿Quieres poder ir a tomar algo en alguna ocasión? Suena muy obvio que al respuesta es «sí», pero NO; no podías porque no te habías inyectado su basura en las venas. Si decides renegar de eso y salirte del circulo social, tampoco te lo ponen fácil, son todo limitaciones y prohibiciones. Sí, has leído bien. Ni ibas ni vas a poder pasear tranquilo por la calle porque a veces necesitas el pase de obediencia, otras te encuentras a esos amables seres de luz que están rodeando TU entorno. Si no sabes a lo que me refiero, lo detallo un poco más: hablo de culturas diferentes a las nuestras que, por ciertas incompatibilidades, suponen un peligro para tu vida diaria. ¿Crees que soy racista? Pues agárrame el cubata, porque si eso no te parece justo, a lo mejor estar rodeado de «ex» terroristas hace que lo veas un poquito más claro.
Pero por segunda vez te digo: lee bien que he puesto «TU» entorno, no el suyo. ¡Ah, no! Ell@s no van a lidiar con «eso»; ell@s van con sus coches privados, sus mansiones, su seguridad privada, su tarjeta sin límte y un largo etcétera en lo que a privilegios se refiere.
Mediante la ventana de Overton han conseguido que aceptes y llegues a asimilar lo que antes era siquiera impensable, una barbaridad. Despierta de una vez, porque ya vas tarde. Vamos tarde. Algun@s ya hemos despertado, pero tenemos que ser tod@s los que lo hagamos junt@s. Ya llegamos tarde y yo quiero solucionar problemas, no acostumbrarme a vivir con ellos, con ésto. Así no. Ésto no es vivir; no como yo quiero vivir.
No pienso ir a hurtadillas. En la obra de mi vida yo soy Director, Guionista y Actor. No quiero que nadie me dirija ni decida por mí. Quiero tomar mis propias decisiones…!y estoy seguro que tú también!
Besa a quien quieras, cuando quieras y hazlo libremente. Es tu decisión, es tu vida. Así es como se va por la vida, con la cabeza alta y superando las adversidades, respetando y siendo respetado. Pero no se pasa de cuclillas; al menos no cuando uno tiene el valor de decir no a la opinión popular y no se deja influenciar por la presión social que le rodea. Así se puede y es así como vamos a hacerlo. Pero junt@s.
Un amiguete mío, Eloy, me dijo hace mucho tiempo: Lo difícil se consigue, lo imposible tarda un poco más. Ya sabía esa frase antes que él me la dijera, pero me la dijo en el momento adecuado y aun hoy estoy recogiendo los frutos. Por tanto, vayamos levantándonos y diseñando el mundo que queremos. Debemos construirlo entre tod@s y es algo que no puede esperar.
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